¡¡¡LA MUERTE ES...JUSTIFICADA

¡¡¡LA MUERTE ES… JUSTIFICADA!!!

Desde el fondo de tu vientre,
me sentí muy desgraciado
porque oí hablar de muerte,
para el hijo no esperado.

Sentí miedo y gran tristeza,
sentí un gélido frío,
porque mi madre, en su seno,
me ignoraba, por su hastío
y actitud…; por su torpeza…

Con alguien, de muerte hablaba
y asentía con firmeza
para seccionar mi cuerpo;
en la Clínica Privada
o en cualquier otro Centro;
porque la ley le amparaba.

Quise pedirle a mi madre
que, por amor, no lo hiciera,
que sería yo buen hijo
al momento que naciera.

Mas, mi voz quedó ahogada
y no pude ya gritarle.
¡Yo quería siempre amarle
y, por mí, ser abrazada!

Se hizo un silencio, profundo;
pronto fue la noche oscura
en el vientre de mi madre,
que por leyes de este mundo,
fue, para mí, sepultura.

La cabeza destrozada;
el cuerpo, todo molido;
la madre más desgraciada
por el aborto sufrido.
¡Maldita ley aprobada,
que no es de recto sentido!

Siendo la Vida Sagrada,
los hombres han decidido
que, matar al No Nacido,
no es Crimen, que ¡NO SOY NADA.!
Las conciencias se han dormido…
¡¡¡LA MUERTE ES… JUSTIFICADA!!!


A. Carrascosa.
Torrenueva 14-08 2010